«Lo que inició como una carne asada y un convivio familiar término en una pelea a golpes en el que una mujer resultó herida».
GUADALUPE, ZACATECAS. Los hechos ocurrieron en la comunidad San Ramón d l municipio en un domicilio particular, en el que varias personas comenzaron a disfrutar el fin de semana con una carne asada a la intemperie y unas cuantas cervezas.
Pasados de copas , unos hombres comenzaron a discutir y a empujarse entre ellos, pero se apaciguaron conforme comenzaron el diálogo.
Horas más tarde al anochecer nuevamente comenzaron los empujones y las agresiones verbales por parte de dos hombres en un estado de ebriedad muy avanzado.
A lo que menciona uno de los familiares presentes, la discusión comenzó por problemas de índole familiar de carácter económico y sobre herencias.
Por lo que entre la misma discusión comenzaron las agresiones físicas, golpes, insultos, y hasta botellazos.
Uno de los mismos integrantes familiares quiso lanzar una piedra a uno de los dos protagonistas del pleito.
Entre la pelea se introdujo una mujer de aproximadamente 35 años, también en un estado de ebriedad muy avanzado hablando de forma incoherente y queriendo apaciguar la situación. Sin embargo, los golpes le tocaron en el rostro a la mujer junto con la parte de las costillas y de paso la pedrada en la cabeza que lanzó uno de los familiares.
La mujer cayó directo al suelo en un estado de inconsciencia, al ver esto, inmediatamente la pelea se detuvo y todos los familiares presentes llamaron a los números de emergencia 911 solicitando el apoyo de una unidad médica.
En cuestión de unos minutos, acudieron paramédicos de la Cruz Roja Mexicana quienes brindaron los primeros cuidados médicos a la mujer y la trasladaron a un hospital para la mejora de su atención.
En el momento de la revisión médica, los paramédicos confirmaron que la mujer había sufrido de una contusión por el impacto de la roca contra su cabeza, además de qué uno de los impactos en su rostro le había roto la nariz.
La intención de trasladarla a un hospital era para descartar fracturas en la zona de las costillas. Por lo que la mujer fue acompañada en la unidad móvil por su suegra y no por el esposo, de quién se sospecha, fue uno de los protagonistas de la pelea que además también la golpeó sin premeditar su presencia durante el pleito.
De la mujer no se sabe su estado de salud, más que lo que confirmo el personal de la Cruz Roja Mexicana en el momento de la revisión.
No se levantaron cargos debido a que todos los presentes eran familiares y probablemente se encubrieron entre ellos.
La carne asada junto con la fiesta, el convivio familiar y el alcohol, terminaron después de trasladar a la mujer al hospital.
